En primer lugar deseo a mis queridos seguidores y amigos un feliz inicio de la primavera o del atoño, según el caso. Sentimientos dispares nos invaden a cada uno, sin duda, según el momento del año que atravesamos.
En cuanto al tema de este post la experiencia me ha enseñado que las autoridades de las escuelas, por lo menos aquí en la Argentina, en general no han dado importancia a la necesidad de preparar a sus docentes para el manejo del aula y del mal comportamiento. No es de sorprender, quizás, dado que la formación docente, aquí y en muchas partes del mundo, sigue siendo enfocada principalmente en, por ejemplo, la historia y la filosofía de la educación, metodología, planificación de clases entre otros. Todos estos son temas fundamentales y necesarios por supuesto, pero hoy más que nunca los docentes también necesitan capacitación en el manejo del comportamiento en el aula.
Es bien reconocido a través de distintos estudios que uno de los grandes problemas que debe enfrentar el docente diariamente es la interrupción de sus clases a causa del mal comportamiento de algunos alumnos, sea por abuso verbal o falta de respeto. No son pocos los docentes que han decidido abandonar la profesión porque el nivel de mal comportamiento era ya intolerable. La inmensa mayoría de los docentes están de acuerdo que no están preparados para enfrentar adecuadamente a este problema. Es evidente que semejantes interrupciones no sólo afecta la calidad del aprendizaje y de la vida escolar en sí, sino que también pueden contribuir a la ausentismo escolar, la formación de pandillas y a la disfunción familiar.
¿Será que la formación docente está sobrecargada de teoría abstracta y de poca ayuda práctica y realista? En otras palabras, docentes en formación reciben muy poco que les ayuda a saber que hacer concretamente ante las situaciones de indisciplina que surgen en la vida áulica. Parecería necesario agregar a la teoría y a la percepción del docente acerca de la formación de la niñez algo más que le permite saber como controlar a su clase. Obviamente le sirve poco el primero si no logra el segundo. Es por eso que insisto que los docentes necesitan como una prioridad saber del manejo del comportamiento en la clase, algo que debe enfrentar todos los días del año escolar. Ni la enseñanza ni el manejo del comportamiento es simplemente conceptual. (continuará)
THEY DIDN’T PREPARE ME FOR THIS
In the first place I wish to welcome my good followers and friends to this beginning of Spring or Autumn (Fall) as the case may be. Without doubt, these moments of the year give rise to varied sentiments in each of us.
In relation to the present post experience has shown me that school authorities, at least here in Argentina, have in general, given little heed to the need to prepare their teachers in matters of classroom and behavior management. This is not surprising perhaps, seeing that here in Argentina as in many other parts of the world, teacher formation continues to put emphasis on, for example, the history and philosophy of education, methodology and class planning, among others. All of which, of course, is necessary and fundamental, but it cannot be ignored that today especially, teachers need training in the management of classroom behavior.
It is well-known from the many surveys made throughout the world, that one of the greatest problems that all teachers have to face daily is that of class interruption due to the misbehavior of some students, either in the form of verbal abuse or lack of respect. A number of teachers have decided to abandon the teaching profession because the level of misbehavior in the classroom became intolerable. It appears that most teachers acknowledge that they have not been prepared to confront this problem adequately. It is therefore evident that such interruptions not only affect the quality of learning and school life but can also contribute to truancy, gang formation and to family dysfunction.
It would appear then that teacher formation continues to be overburdened with abstract theory and little help with concrete, practical and realistic issues such as behavior management within the classroom. It seems absolutely necessary to add to the theory and teacher perceptions of child formation, elements that will help him/her with such matters as proper classroom control. It is obvious that all the best theory in the world will not suffice if adequate control and management of the class is absent.
For this reason I continue to insist, that as a priority, teachers need assistance and proper training in matters of classroom management, something which will be demanded of them every day of the school year. Neither true teaching nor behavior management is just conceptual. (to be continued)
This blog deals with the ever occurring theme of classroom management, positive discipline in the classroom and related matters of interest to teachers. El tema de mi blog es el siempre presente problema para los docentes del comportamiento en el aula, formas de disciplina positiva y todo relacionado con esta materia.
miércoles, 21 de marzo de 2012
viernes, 9 de marzo de 2012
RELACIONES HUMANAS EN LA ESCUELA - Spanish & English versions
Cuando hablamos de comportamiento en la escuela, estamos hablando también y necesariamente de las relaciones entre las personas dentro de la institución. Tal vez no estamos acostumbrados a considerar la relación entre el maestro y el alumno en términos de una relación humana. Es cierto que esencialmente esta relación ha sido considerada como un instrumento para transmitir conocimientos, el objetivo específico de la escuela por lo menos hasta el día de hoy. Por otro lado, si la relación entre las personas en la escuela no se desarrolla dentro de ciertos parámetros psicológicos, éticos y emocionales, difícilmente se puede hablar de enseñar y aprender.
Al abordar el tema de las relaciones humanas hay que preguntarse siempre si uno es parte del problema que existe en una determinada relación, pasando de la crítica a la autocrítica, lo que siempre duele.
Por supuesto lo que hay que evitar son los extremos, por un lado no hacerme cargo de lo que me corresponde y de lo que no. Por otro lado, no poner la causa del problema sólo en el otro, sea colega o alumno, y así desarrollar la imagen de la víctima. Es necesario atribuirse sinceramente a sí mismo la parte de los problemas de la relación que corresponde y de esta manera abrir paso al entendimiento y a la superación de ella. En una palabra aprender a asumir mi zona de incumbencia, algo que no es siempre fácil cuando surgen problemas de convivencia. Al respeto, se suele distinguir la zona de incumbencia de la zona de preocupación. Es decir saber poner la energía en aquello que puedo modificar y no en lo que no puedo modificar.
Por supuesto lo que hay que evitar son los extremos, por un lado no hacerme cargo de lo que me corresponde y de lo que no. Por otro lado, no poner la causa del problema sólo en el otro, sea colega o alumno, y así desarrollar la imagen de la víctima. Es necesario atribuirse sinceramente a sí mismo la parte de los problemas de la relación que corresponde y de esta manera abrir paso al entendimiento y a la superación de ella. En una palabra aprender a asumir mi zona de incumbencia, algo que no es siempre fácil cuando surgen problemas de convivencia. Al respeto, se suele distinguir la zona de incumbencia de la zona de preocupación. Es decir saber poner la energía en aquello que puedo modificar y no en lo que no puedo modificar.
Todo esto salta a la vista en el contexto escolar. Hay cosas que generan el mal comportamiento que están fuera de mi competencia, como, por ejemplo la falta de capacitación profesional de mis colegas o los desequilibrios en la formación familiar de los alumnos. Nos preocupan, por supuesto, pero no nos podemos ocupar de ellas. Por eso, cuando asumo el papel de víctima o me concentro sólo en la zona de preocupación lo único que logro es no hacerme cargo y que el problema continúa. Por lo contrario, si me concentro en mi zona de incumbencia es muy probable que, tarde o temprano opero indirectamente en la zona de preocupación. Por ejemplo, si me ocupo de acercarme e interesarme en el alumno conflictivo y con paciencia desarrollo la relación adecuadamente, esto puede tener un efecto beneficioso en la relación del alumno con su familia y de la familia con la escuela.
Si aceptamos que en relación al tema de la convivencia y el comportamiento escolar no es posible encontrar soluciones definitivas y si evitamos la tentación de la simulación, no poco frecuente, manteniendo los problemas debajo de la alfombra, es posible pasar del concepto de solución al concepto de mejora. Este cambio de concepto y también del lenguaje que utilizamos permite un criterio más adecuado, que es promover un proceso de solución o mejora. Aquí es necesario ante todo buscar y saber las raíces del problema o la causa principal. Esto podría llevar, a la vez, a que haya resistencias al cambio de parte de algunos o de toda la institución. El próximo paso entonces podría ser tomar esa resistencia como información pertinente que nos invita a acercarnos al problema tal vez desde otro ángulo, aunque parezca secundario por el momento.
Como sabemos, todo camino comienza por un paso. Por eso, este proceso no significa ocultar o ignorar las dificultades de fondo, que deberían ser explicitadas y tomadas en cuenta como parte del trabajo futuro. Es asumir conscientemente que el proceso de cambio no empiece haciendo el mejor sino el mejor posible. De esta manera la búsqueda de soluciones a las dificultades de convivencia en la escuela consistirá, no en discursos, argumentos o la simple buena voluntad de los integrantes, sino en la toma de medidas simples y concurrentes de mejora que avanzan indefectiblemente hacia soluciones mas profundas. Para citar una frase muy conocida, si no soy parte de la solución, soy parte del problema.
(Este tema se encuentra desarrollado plenamente en "Climas Educativos y Pronósticos de Violencia" Capitulo 3, de Fernando Onetto, Ediciones Novedades Educativas)
English Version:
When we speak of behavior in the school we are also speaking necessarily of the relationship between the people within the institution. Perhaps we are not too accustomed to considering the relationship between teacher and student in terms of human relations. It is true that this relationship has always been considered essentially an instrument for transmitting knowledge, the traditional role of the school up to the present, at least. On the other hand if the relationship between persons in the school context does not develop within certain psychological, ethical and emotional parameters we can hardly speak of a proper ambience for teaching and learning.
When taking on the question of human relations one must necessarily ask whether one is part of the problem that may exist in a determined relationship, thereby crossing the line from criticism to self-criticism, even if it does hurt. Of course what we must avoid are extremes, on the one hand not taking on responsibility where appropriate and where it is not. On the other hand, not placing the responsibility for the problem only on the other, whether colleague or student, thereby assuming the role of victim. It is necessary to attribute sincerely to oneself those problems in the relationship that correspond thus opening the way to greater understanding and to solving the problem. In a word, learning to assume and limit myself to my own area of concern, something not always easy when living or working together. With respect to this it is common to distinguish between the area that is ones concern and the area that preoccupies or worries and that is not ones direct concern. In other words to put my energy into that which can be modified and not into that which cannot be modified.
All this can become very apparent within the school context. There are things that can cause bad behavior that are not within my competence, such as, for example the lack of adequate professional training of colleagues or the failings in the formation and rearing within the families of my students. These matters do of course worry us but they are outside our competence to do anything about directly. Therefore, when I assume the role of victim and concentrate exclusively on worrying about what is outside my control, all I’m doing is shirking my responsibility and letting the problem stand.
Whereas, if I concentrate my energy on my area of responsibility it is very likely that, sooner or later, I will be able to influence the worry zone. For example, if I take it upon myself to come closer to and become interested in the student who has a behavior problem and patiently develop an adequate relationship , this can eventually have a beneficial effect on the relationship of the student with his/her family and on the relationship of the family with the school.
If we accept that in relation to the matter of coexistence and school behavior it is not possible to find definitive solutions and if we avoid the temptation to simulate, sweeping the problem under the carpet, it is possible to move from the concept of solution to that of improvement. This change of concept and also of the language we use will permit us a more adequate criterion which is to promote a process towards improvement and eventually towards a possible solution. It is necessary in this case to search for and discover the roots of the problem or the principal cause. This can lead in turn to a certain resistance to change on the part of some or on the part of the institution itself. The next step then would be to take this resistance as useful information which would invite us to approach the problem from another perspective, even though this would appear to be secondary for the moment.
As we know, every journey begins with the first step. Therefore the process being suggested does not mean ignoring or covering up the real difficulties, which should be explicit and taken into account as part of the future process. It means assuming consciously that the change process does not often occur doing our best but by doing the best possible. In this manner the search for solutions to school misbehavior will consist, not in discourses, arguments or the good will of those involved, but in the taking of simple and constant measures for improvement that advance inevitably towards more complete solutions. To paraphrase a well-known saying: if I’m not part of the solution, I’m part of the problem.
martes, 28 de febrero de 2012
"THERE´S NO BULLYING IN MY SCHOOL...!" Inglés / Español
I'm aware that I'm talking about a context in Argentina, where let's face it, the whole question of bullying is only recently starting to be taken seriously. An aggressive attitude towards the other, in many contexts from the staff room to the highway, is taken as almost normal, so obviously, in the classroom such aggressive attitudes are often taken as "normal".
Recently, an education psychologist and parent told me that during the past year one of her sons was nicknamed unpleasantly throughout the year by his teacher. She managed to discover the problem towards the end of the year. The school in question is attended mainly by middle-class families, with a certain religious background in most cases. The same person commented that it´s quite common to hear aggressive language used among the teachers themselves in the staff-room. Is it surprising then that many such teachers are unaware of or simply ignore what must be considered as bullying among their students? Nobody can afford to continue ignoring the damaging affects of bullying in whatever context, now increasingly common also in the social networking websites.
Even though earlier posts in my blog have referred in more detail to the question of bullying, the underlying problem of creating classrooms where tolerance, acceptance and respect for each individual is the norm, is still unattended to in much of our local context. Admittedly, it often receives lip-service, but where the school year begins with no training and planning on the part of teachers for classroom behavior, it is only inevitable that serious behavior problems will continue to exist in our schools, whether or not they are recognized as such. I'm aware that there are many demands on the teachers' time prior to the beginning of classes, but there is no need to repeat what has been stated and enlarged upon many times in earlier posts, that planning is necessary for pro-active behavior (positive and preventive) measures in order to avoid reactive behavior, both by teachers and students, in classroom management, with its undesired consequences.
It's never too late to start, so once again may I dare to invite all teachers, especially here in Argentina, to consider seriously starting this new school year with planned objectives with respect to classroom management.
"No hay maltrato en mi escuela...!"
Soy plenamente consciente que me estoy refiriendo a nuestro contexto argentino cuando escribo aquí que la cuestión de “bullying” o maltrato, tanto verbal como físico, es recién empezando a ser tomado en serio. Una actitud agresiva en muchos contextos, desde los ámbitos de trabajo hasta las rutas, es casi aceptado como normal, así que no es de sorprender que el comportamiento similar no llame la atención en la escuela.
Hace unos días una psicopedagoga y madre de familia me contó que un docente le llamaba a uno de sus hijos por un apodo algo ofensivo durante todo el año. Ella misma descubrió la situación recién hacía el fin del año. Los alumnos que asisten a este colegio en cuestión son en su mayoría de la clase media y con una orientación religiosa. La misma persona me contaba también que es bastante común escuchar comentarios agresivos en algunas salas de maestros o profesores de las escuelas. No debe llamar la atención entonces que muchos de estos docentes ignoran o simplemente no prestan atención a situaciones de maltrato o “bullying” entre los alumnos. Ninguno de nosotros podemos hoy ignorar los afectos nocivos de las intimidaciones o agresiones verbales o físicas en cualquier contexto. Lamentablemente esta actitud también se ha extendida a las redes sociales de los sitios web con sus propias consecuencias.
Aunque he elaborado sobre este tema del acoso escolar y maltrato en posts anteriores, el problema subyacente es intentar crear aulas donde la tolerancia, aceptación y respeto mutuo sean la norma. Sin embargo sabemos que implementarlo es todavía una asignatura pendiente en gran parte de nuestro contexto escolar. Es verdad que a veces el tema recibe atención de boquilla de parte de los directivos o docentes, pero cuando el año escolar comienza sin la preparación y planificación de parte del docente para el comportamiento áulico, es casi inevitable que surgirán cada vez más problemas de comportamiento en nuestras escuelas, sean o no reconocidos como tales.
Soy plenamente consciente que hay mucha demanda sobre el tiempo de los docentes previo al inicio de las clases pero no creo que viene al caso volver a insistir sobre lo que he escrito y desarrollado en posts anteriores, es decir la absoluta necesidad de la planificación para poder implementar medidas proactivas en relación al comportamiento escolar para evitar las medidas reactivas tanto de parte del docente como de los alumnos, con sus consecuencias indeseadas.
Nunca es demasiado tarde empezar, así que vuelvo a invitar a todos los docentes y en particular a nuestros docentes argentinos iniciar este nuevo año escolar con objetivos bien planificados en relación al comportamiento en la escuela y en el aula.
miércoles, 8 de febrero de 2012
MIS ALUMNOS QUIEREN ESTAR EN MI CLASE - (Spanish and English)
Aquí en el hemisferio sur los docentes estamos terminando las vacaciones de verano y preparándonos para un nuevo año escolar. ¡Cuántas cosas hay que preparar antes de iniciar las clases! Permítanme plantear un tema que posiblemente no hacemos, simplemente por no darle mayor importancia o por actuar de rutina o tal vez porque queda a nivel de nuestra subconsciencia.
¿Mis alumnos realmente quieren estar en mi clase? ¿Qué pregunta?
Respuesta obvia es que no tienen opción. Aunque esto sea la verdad, no creo que ningún docente esté conforme con semejante respuesta y con todo razón. Así que deseo aprovechar el momento para hablar de algunos aspectos relacionados con este tema.
- Mi actitud interior ante la clase: Una clase prestando atención en su debido momento es algo positivo y ningún profesional tiene porque aguantar la falta de respeto y disrupción de su tarea. Imagínense cualquier médico o abogado tener que pedir silencio y menos aún gritar para atraer la atención de su paciente o cliente. Claro que los tiempos y el contexto son muy diferentes. Pero pónganse en el lugar de Leonardo Da Vinci si aceptara recibir un aprendiz en su atelier. El alumno sabe de entrada que lo que ofrece Da Vinci es de gran valor y cualquier persona estaría muy agradecida de poder acceder a la clase del maestro. Ningún educador tiene por que desvalorizar su profesión actuando como si lo que ofrece a sus alumnos no tuviera gran valor, como si fuera necesario tener que convencer a alguien que venga a su clase o tener que premiarlo por prestar la debida atención.
- ¿De verdad aprecio suficiente lo que tengo que ofrecer a mi clase? Recuerden que la formación que ofrecemos y la manera de comunicarnos fluyen naturalmente de esta actitud y simplificará nuestro trabajo. Mis alumnos tienen el privilegio de estar en mi clase, ¿estoy convencido de esto? ¿Lo comunico con mi actitud desde el primer día? Ningún alumno tiene el derecho de crear una situación que contradice esta perspectiva. Así que es de enorme importancia mi propia actitud interior y explícita desde el primer día de clase. En una palabra, respetense a sí mismos. Usted se siente feliz de poder ofrecer y compartir con sus alumnos su conocimiento si ellos lo reciben con respeto y entusiasmo.
English Version
Here in the southern hemisphere teachers are ending their summer vacation and are preparing for the new school year. Many things have to be attended to prior to the beginning of classes. I would like to bring up a subject that perhaps we don't pay much attention to either because we act routinely or because it is something that remains at the level of our subconscious.
Do my students really want to be in my class?
The obvious answer, of course, is that they have no option. Even though this may be true, I don't think any teacher would be really satisfied with such a simplistic answer. I would therefore like to take this opportunity to consider some points relating to this issue.
- My own interior attitude in front of the class: A class paying attention at the appropriate time is always something positive, and no professional should have to put up with lack of respect and unnecessary interruption. Imagine any doctor or lawyer having to request silence and much less having to shout to capture the attention of his/her patient or client. Naturally, both the time involved and the context are very different. However, lets suppose that Leonardo Da Vinci accepts an apprentice painter in his studio. The apprentice is fully aware from the start that he is privileged and that what Da Vinci has to offer is of great value and anyone would be more than happy to have access to such a privilege. No educator should underrate his/her profession acting as if what they have to offer is of little value, as if it were necessary to persuade someone to come to the class or have to offer them a special reward for paying due attention.
- Do I truly appreciate sufficiently what I have to offer my class? Remember that the teaching we offer and the manner in which we communicate flow naturally from this appropiate attitude and simplifies our work. The students are privileged to be in my class. Am I convinced of that? Do I communicate that with my attitude from the first day, acknowledging that no student has the right to contradict such perspective? This must be my interior as well as my explicit attitude from the first day of class. In a word, let it be clear that you respect and value yourselves and your important profession. You feel happy to be able to transmit and share your knowledge with your students provided it is accepted with respect and enthusiasm.
viernes, 2 de diciembre de 2011
El PODER en el AULA
Sin duda hay docentes que sienten la necesidad de trabajar mucho en el manejo del aula y la disciplina y otros, que lo logran con más naturalidad. Obviamente, las circunstancias y los tiempos pueden variar mucho y no corresponde aquí pretender imponer supuestas soluciones fáciles ni simplificar lo que por su naturaleza puede ser complicado sobretodo en determinados ámbitos.
¿Pero es demasiado sostener que un buen docente, en circunstancias normales, no necesita trabajar mucho en el manejo del aula, classroom management o en lograr un comportamiento adecuado?
Veamos. Para empezar un buen docente mantiene la calma, siempre, es una persona emocionalmente calorosa y estable, es un placer estar con él o ella. En una palabra es una persona que lleva puesta un aura de autoridad positiva, sabe lo que hace, lo disfruta y también sus alumnos.
Todo docente y alumno debe entender que el respeto hacia sí y hacia los demás y la autodisciplina son necesarios en un estilo de vida sano. Además, el buen docente sabe que no existe "el mejor método" de disciplina, sino que existen diferentes métodos para ser aplicados según las diferentes circunstancias. Por eso insistimos en estar preparados. La reacción nunca puede suplir la acción premeditada, basada en los derechos y las obligaciones sino, al contrario, muchas veces induce a una reacción contraria de parte del alumno y a error de parte del docente.
Y ¿qué desea todo alumno? Sentirse querido, importante, motivado, sentir que pertenence y poder disfrutar el aprendizaje. Así que la mejora en la educación finalmente depende en gran parte del docente mismo, y si toda la institución acompaña, mejor. Necesitamos construir desde la base para prevenir problemas potenciales. Por supuesto la edad del pavo, la adolescencia, existe con sus propias características físicas, emocionales y sociales. Entenderlo y aceptarlo como propio y normal facilita y hace realista a su vez las expectativas tanto de los alumnos como las nuestras. En la educación las expectativas son fundamentales. Muchos habrán leído del experimento llevado acabo donde dos grupos de alumnos fueron presentados a sus respectivos docentes al principio del año escolar, uno supuestamente muy inteligente y capaz y el otro mediocre. Al final del año, el grupo "inteligente" había avanzado mucho y el grupo "mediocre" muy por debajo. Luego explicaron que en realidad los dos grupos habían sido elegidos al azar. Todo dependía de las expectativas.
En todo liderazgo la conexión emocional es muy importante, pero por otro lado no puede ser simulado. Así es que o el docente marca el tono y las pautas o lo harán los alumnos. Hay que siempre iniciar la clase allá arriba, con energía y terminar con energía y dejar el resto para el medio. De esta manera el docente marca el paso y va hacia los alumnos no el inverso.
La experiencia me ha enseñado que cuando el docente acompaña a los alumnos al aula, o por lo menos los espera en la puerta mientras entran al aula, es más fácil lograr inmediatamente el clima de trabajo. Entrar al aula después de que todos los alumnos hayan ingresado pone al docente en desventaja y produce demora en el arranque de las actividades. Tener la consigna de trabajo claramente explicitada desde el primer momento facilita la energía mencionada arriba.
La experiencia me ha enseñado que cuando el docente acompaña a los alumnos al aula, o por lo menos los espera en la puerta mientras entran al aula, es más fácil lograr inmediatamente el clima de trabajo. Entrar al aula después de que todos los alumnos hayan ingresado pone al docente en desventaja y produce demora en el arranque de las actividades. Tener la consigna de trabajo claramente explicitada desde el primer momento facilita la energía mencionada arriba.
martes, 22 de noviembre de 2011
NO SENTIRSE SOLO
La verdad es que no está solo y en este caso particular no es consuelo de tontos repetir que docentes en todo el mundo y en todos tipos de instituciones escolares deben enfrentar el desafío de mantener el ambiente propicio para faciliar el aprendizaje y una enseñanza eficaz. Es por eso que en la medida que se vayan agregando nuevos lectores a este blog puede resultar conveniente sintetizar algunos de los puntos centrales de mi propuesta para facilitar el comportamiento adecuado en el aula.
Al hablar de disciplina en el aula es normal que pensemos inmediatamente en los alumnos. Sin embargo todo docente con algo de experiencia sabe que lograr la disciplina adecuada también depende mucho del mismo docente. Nosotros docentes también llevamos nuestras emociones al aula. Pero, ¿las sabemos manejar bien siempre? Cuando entra al aula escolar el docente no entra en un "estado puro" sino lleva consigo no sólo su bagaje cultural sino también su carga de emociones, sentimientos y preocupaciones familiares propio de todo ser humano incluyendo a sus alumnos. Por eso es bueno recordarnos frecuentemente que las emociones son contagiosas y que recibiremos exactamente lo que damos.
Classroom management o el manejo del aula empiece con el respeto, y el respeto empiece conmigo mismo. Los alumnos necesitan ver a su docente con confianza en si mismo y eso significa que mantenga el respeto y la dignidad en todo momento. Ah, mi dirá, no sabes qué tengo que enfrentar yo todos los días! Efectivamente, hay situaciones de alta conflictividad que necesitan un tratamiento especial y un programa de disciplina orientado a manejar semejante situación que merecería un capítulo aparte. Pero supongamos que el contexto de la mayoría de nuestras escuelas es lo que llamaríamos "normal", es decir que diariamente debemos controlar no un alumno armado con una pistola, sino liderar con los actos de indisciplina comunes y frecuentes de todas las escuelas.
Cuando hablo aquí de siempre empezar el año escolar formulando junto con los alumnos las normas de convivencia, la reglas que gobernarán la conducta en el aula y las consecuencias lógicas que deben aplicarse en caso de indisciplina reiterada (ver el post del 5/11/2010 entre otros)no se trata de una solución total y definitiva al problema del conflicto y la conducta escolar. Lo que sugerimos es ir tomando pasos posibles y claros para resolver estos problemas y a ensayar "múltiples dispositivos de mejora" que no se agoten en palabras y discursos del docente, al tener que interrumpir la clase. Al contrario, es mejor dedicar unas pocas horas al tema al principio del año escolar para precisamente evitar la constante interrupción de la clase durante el resto del año. ¿Cuántas horas de enseñanza efectiva se pierde anualmente debido a estas interrupciones por la falta de previsión?
También se trata de establecer una mejor relación docente-alumno, talvez modificar una actitud con los otros o cambiar ciertos procedimientos que terminan fomentando el conflicto en vez de resolverlo. Al fin, lo que buscamos ante todo es mejorar la convivencia, no necesariamente solucionar todo conflicto que de hecho es imposible en este caso de la convivencia y conducta escolar. Es, en una palabra, invitar a todos los protagonistas del problema a ser protagonistas de la solución.
Si fueramos sinceros con nosotros mismos, el gran peligro que enfrentamos todos es el miedo a abandonar el camino ya recorrido y conocido;el sabido dicho lo dice todo: "más vale malo conocido...", es decir hay que tomar riesgos para poder mejorar cualquier situación conflictiva en la vida.
No debemos tener miedo a cometer errores en nuestro intento por mejorar nuestras relaciones con los alumnos y las de los alumnos entre sí. Al contrario necesitamos aumentar la confianza en nuestra propia capacidad de mejorar las relaciones, y repito, lo que buscamos es mejorarlas no solucionar todos los problemas que surgen en el aula. Mejorar, muchas veces no es más que transformar nuestras prácticas en el aula.
Es bueno recordar que los alumnos deben poder visualizar algún beneficio por cambiar su conducta, porque toda conducta aporta algún beneficio real o imaginario. Por eso, mejorar o cambiar la conducta tanto del docente como del alumno exige ofrecerles recursos y estos recursos incluirán necesariamente nuevos procedimientos y prácticas alternativas. Estos a su vez apelan la creatividad del docente y la de los alumnos, y de eso se trata. No tengamos miedo a probar, mejorar es siempre posible...no estamos solos. Hasta pronto
martes, 18 de octubre de 2011
Ubicación de los Bancos en el Aula
Todo docente con algo de experiencia sabe la importancia de poder acceder con facilidad al banco de cada alumno en el aula. También sabe que algunos alumnos especulan con la posibilidad de poder esconderse o pasar lo más desapercibidos posible. Entonces surge la pregunta si es conveniente que el docente asigne los bancos a los alumnos o dejarlos libres para elegir la ubicación de sus bancos.
Las opiniones están divididas y la respuesta dependerá mucho de la filosofía del docente en relación a la educación. ¿Es el tema simplemente tener control total de todo lo que pasa en el aula o se trata de crear un ámbito lo más democrático posible y enseñar a asumir responsabilidad por sus actos? Por todo lo que vengo proponiendo en este blog, es obvio que mi preferencia sería por la segunda. Pero, también mi experiencia propia y la de muchos docentes demuestra que no es siempre tan fácil, y que un equilibrio es necesario para lograr el ámbito propicio y un aprendizaje efectivo. La composición de cada grupo necesita ser evaluado antes de determinar definitivamente que es lo que conviene en cada caso. Es por eso que cierta flexibilidad de parte del docente es siempre conveniente, más que una posición fija y predeterminada al iniciar el año. Con grupos de mayor edad he experimentado con el formato del semicirculo, cuando el espacio permitía, donde cada alumno podría ver la cara de los demás y el docente también y a las ideas de cada uno se les da el mismo valor en discusión. Esto funcionó bien con algunos grupos y con otros no.
Lo que siempre predomina es la necesidad de que el docente tenga acceso fácil y rápido a cada alumno. Como suele decir Fred Jones, un experto en classroom management "Usted maneja el grupo o el grupo maneja a usted". El sentido común de todo docente dicta que es fundamental que circule alrededor de la clase, que se puede acercar a cada uno de los alumnos y de esta manera asegurar que estén aplicados a la tarea en mano y no distraidos con otra cosa. Obviamente, habrá alumnos para los cuales este tipo de acercamiento frecuente es más necesario y aconsejable.
Podemos asegurar que esta mobilidad de parte del docente es una manera segura y simple de ejercer classroom management o el manejo de aula. No hay mensaje más claro para ciertos alumnos que tener el docente cerca y observando y por el contrario, tener el docente lejos e inmobil adelante y así sentirse libre de molestar, interferir o ser indisciplinado. ¿Quiénes de nosotros, como alumnos, no nos hemos sentidos "más cómodos" tener al docente lejos de nosotros?
Como mencioné anteriormente, lo importante aquí es tener la flexibilidad necesaria para cambiar y adaptarme según las circunstancias de espacio y las necesidades de cada grupo. Tener normas demasiadas rígidas juegan en contra. Lo que se busca es el equilibrio delicado entre el mensaje claro acerca de la territorialidad o quién manda en el aula y que los alumnos se sienten cómodos y seguros en un ámbito agradable. Hay ventajas y desventajas en cualquier disposición de los bancos en el aula, así que lo importante es lo que funciona mejor para cada uno y en cada circunstancia.
miércoles, 10 de agosto de 2011
Dar elogios donde realmente importan
Leí el siguiente resultado de una investigación entre terapeutas hace un tiempo atrás (no me acuerdo dónde, ni el autor, por lo cual pido las debidas disculpas) y me parecía importante compartirlo y tenerlo en cuenta, no sólo en la escuela sino en todas nuestras relaciones. Parecería contradecir lo que superficialmente observamos a diario, pero cuando lo pensamos un poco, nos damos cuenta que algo tiene de verdad y no deja de ser un alerta, dada la superficialidad de mucho de lo que consideramos "comunicación" hoy. Los medios para comunicarnos abundan pero ¿nos llevan a una mejor calidad de relaciones? La experiencia nos demuestra que no.
"Renombrados terapeutas que trabajan con familias, divulgaron una reciente investigación donde se hace notar que los miembros de las familias en general están cada vez más fríos, no existe más cariño, solo se escuchan críticas.
No se da más valor a las cualidades. Las personas están cada vez más intolerantes y se desgastan dando valor a los defectos de los otros. Por eso, las relaciones de hoy no duran.
La ausencia del elogio está cada vez más presente en las familias de media y alta renta. No vemos a los hombres elogiando a sus mujeres o viceversa, no vemos a los jefes elogiando el trabajo de sus subordinados, no vemos casi nunca a los padres e hijos elogiándose, ni a los amigos, etc.
Sólo vemos personas superficiales y fútiles dando valor a artistas, cantores, a personas que usan la imagen para ganar dinero y que, por consecuencia, son personas que tienen la obligación de cuidar del cuerpo y del rostro.
Esa ausencia de elogio ha afectado mucho a las familias.
La falta de diálogo en sus hogares, el exceso de orgullo impide que las personas digan lo que sienten y llevan esa carencia para dentro de los consultorios.
Destruyen sus matrimonios, y acaban buscando en otras personas lo que no consiguen dentro de casa.
Comencemos a dar valor a nuestras familias, amigos, alumnos, subordinados. Vamos a elogiar al buen profesional, la buena actitud, la ética, la belleza de nuestros compañeros o nuestras compañeras, el comportamiento de nuestros hijos y alumnos.
Vamos a observar lo que las personas gustan.
Vivimos en una sociedad en la que uno necesita del otro, es imposible vivir solo y aislado, y los elogios son la motivación en la vida de cualquier persona. ¿A cuantas personas podrías hacer felices elogiándolas de alguna manera?
¡Entonces comienza elogiando a alguien hoy!"
"Renombrados terapeutas que trabajan con familias, divulgaron una reciente investigación donde se hace notar que los miembros de las familias en general están cada vez más fríos, no existe más cariño, solo se escuchan críticas.
No se da más valor a las cualidades. Las personas están cada vez más intolerantes y se desgastan dando valor a los defectos de los otros. Por eso, las relaciones de hoy no duran.
La ausencia del elogio está cada vez más presente en las familias de media y alta renta. No vemos a los hombres elogiando a sus mujeres o viceversa, no vemos a los jefes elogiando el trabajo de sus subordinados, no vemos casi nunca a los padres e hijos elogiándose, ni a los amigos, etc.
Sólo vemos personas superficiales y fútiles dando valor a artistas, cantores, a personas que usan la imagen para ganar dinero y que, por consecuencia, son personas que tienen la obligación de cuidar del cuerpo y del rostro.
Esa ausencia de elogio ha afectado mucho a las familias.
La falta de diálogo en sus hogares, el exceso de orgullo impide que las personas digan lo que sienten y llevan esa carencia para dentro de los consultorios.
Destruyen sus matrimonios, y acaban buscando en otras personas lo que no consiguen dentro de casa.
Comencemos a dar valor a nuestras familias, amigos, alumnos, subordinados. Vamos a elogiar al buen profesional, la buena actitud, la ética, la belleza de nuestros compañeros o nuestras compañeras, el comportamiento de nuestros hijos y alumnos.
Vamos a observar lo que las personas gustan.
Vivimos en una sociedad en la que uno necesita del otro, es imposible vivir solo y aislado, y los elogios son la motivación en la vida de cualquier persona. ¿A cuantas personas podrías hacer felices elogiándolas de alguna manera?
¡Entonces comienza elogiando a alguien hoy!"
viernes, 5 de agosto de 2011
Un Héroe, pero de Verdad
Hace pocos días se publicó en un diario local un breve artículo del filósofo Español, Fernando Savater, copiado del diario El País, con el título: "Asesinado por querer educar a las mujeres". Relata que Jan Mohammad, el director de la escuela de Porak, un pueblo en la provincia afgana de Logar "fue tiroteado a sangre fría por los talibanes a la puerta de su casa y murió ante los ojos de uno de sus hijos, también herido en el ataque". Su delito fue "admitir niñas en sus aulas para que fuesen educadas como el resto de los infantes de su edad". Aclara el autor que debido a la discriminación de las niñas en ese país "de más de seis millones sólo van a la escuela dos millones y medio, pero menos del veinte por cientro con regularidad".
Esto me hace recordar el trabajo que inició el alpinista norteamericano Greg Mortenson después de su fallido intento de escalar el K2, la segunda montaña más alta del mundo, en 1993, y que describe en su, ahora famoso, libro "Tres Tazas de Té". Greg fue candidato para el Premio Nobel de la Paz en 2009, pero como es de esperar, no recibió el premio, ya que en estos casos generalmente se imponen presiones de otro índole. Su trabajo, junto con su fundación el "Central Asian Institute" (http://www.ikat.org/) está señalando al mundo el verdadero camino hacia la paz en aquella región, un camino lejos de la guerra y la imposición de la paz a través de las armas. Es la misión de luchar contra el extremismo y el terrorismo construyendo escuelas, especialmente para niñas.
Me llama la atención la sensatez del mensaje y obra de Mortenson y cito lo que el periodista Kevin Fedarko escribió en Parade el 6 de abril de 2003: "Mientras Estados Unidos se enfrenta el régimen de Saddam Hussein en Iraq, Greg Mortenson está haciendo una campaña pacífica contra el integrismo islámico, que tiende al reclutamiento de miembros a través de las escuelas religiosas llamadas madrazas. El enfoque de Mortenson gira en torno a una sencilla idea: con la construcción de escuelas laicas y con el fomento de la educación - sobre todo para las niñas - en la zona bélica de mayor inestablilidad del mundo, el apoyo a los talibanes y a otras corrientes integristas acabará desapareciendo."
Volvemos al tema de siempre: la educación es el único camino certero hacia la paz, la tolerancia y el entendimiento mutuo. Los integristas islámicos siguen utilizando su estilo de educación, más bien indoctrinamiento, para reclutar miles de niños y jóvenes para su "guerra"o jihad. Las palabras de Mortenson al respecto son elocuentes: "He aprendido que el terror no existe simplemente porque un grupo de personas de algún lugar de Pakinstán o Afganistán decida odiarnos. Existe porque no se está ofreciendo a los niños un futuro lo suficientement esperanzador como para que tengan una razón para elegir entre la vida y la muerte." En otro momento Mortenson hablando ante los generales estadounidenses en el Pentágono dijo: "Con ese dinero (el alto costo de los centenares de misiles crucero lanzados en Afganistán), se podrían construir decenas de escuelas y proporcionar a miles de estudiantes, ahora y en generaciones venideras, el acceso a una educación equilibrada y no integrista" y terminó con la pregunta "¿Qué otra estrategia creéis que puede garantizarnos mayor seguridad?"
Pero retornando a nuestra realidad más cercana nos preguntamos también ¿qué otra estrategia puede garantizar mayor seguridad en nuestras ciudades, pueblos y familias que una educación plena y equilibrada para todos los niños y niñas de nuestro país. Una educación equilibrada es una educación democrática apoyada en la dignidad de cada persona y la solidaridad, la primacía del ser sobre el tener y en desarrollar la autonomía y la creatividad.
Permítanme terminar con dos citas muy conocidas: "No hagas a los demás, lo que no quieras que te hagan a ti" y "Gozamos poco por lo mucho que tenemos y sufrimos mucho por lo poco que nos falta".
Esto me hace recordar el trabajo que inició el alpinista norteamericano Greg Mortenson después de su fallido intento de escalar el K2, la segunda montaña más alta del mundo, en 1993, y que describe en su, ahora famoso, libro "Tres Tazas de Té". Greg fue candidato para el Premio Nobel de la Paz en 2009, pero como es de esperar, no recibió el premio, ya que en estos casos generalmente se imponen presiones de otro índole. Su trabajo, junto con su fundación el "Central Asian Institute" (http://www.ikat.org/) está señalando al mundo el verdadero camino hacia la paz en aquella región, un camino lejos de la guerra y la imposición de la paz a través de las armas. Es la misión de luchar contra el extremismo y el terrorismo construyendo escuelas, especialmente para niñas.
Me llama la atención la sensatez del mensaje y obra de Mortenson y cito lo que el periodista Kevin Fedarko escribió en Parade el 6 de abril de 2003: "Mientras Estados Unidos se enfrenta el régimen de Saddam Hussein en Iraq, Greg Mortenson está haciendo una campaña pacífica contra el integrismo islámico, que tiende al reclutamiento de miembros a través de las escuelas religiosas llamadas madrazas. El enfoque de Mortenson gira en torno a una sencilla idea: con la construcción de escuelas laicas y con el fomento de la educación - sobre todo para las niñas - en la zona bélica de mayor inestablilidad del mundo, el apoyo a los talibanes y a otras corrientes integristas acabará desapareciendo."
Volvemos al tema de siempre: la educación es el único camino certero hacia la paz, la tolerancia y el entendimiento mutuo. Los integristas islámicos siguen utilizando su estilo de educación, más bien indoctrinamiento, para reclutar miles de niños y jóvenes para su "guerra"o jihad. Las palabras de Mortenson al respecto son elocuentes: "He aprendido que el terror no existe simplemente porque un grupo de personas de algún lugar de Pakinstán o Afganistán decida odiarnos. Existe porque no se está ofreciendo a los niños un futuro lo suficientement esperanzador como para que tengan una razón para elegir entre la vida y la muerte." En otro momento Mortenson hablando ante los generales estadounidenses en el Pentágono dijo: "Con ese dinero (el alto costo de los centenares de misiles crucero lanzados en Afganistán), se podrían construir decenas de escuelas y proporcionar a miles de estudiantes, ahora y en generaciones venideras, el acceso a una educación equilibrada y no integrista" y terminó con la pregunta "¿Qué otra estrategia creéis que puede garantizarnos mayor seguridad?"
Pero retornando a nuestra realidad más cercana nos preguntamos también ¿qué otra estrategia puede garantizar mayor seguridad en nuestras ciudades, pueblos y familias que una educación plena y equilibrada para todos los niños y niñas de nuestro país. Una educación equilibrada es una educación democrática apoyada en la dignidad de cada persona y la solidaridad, la primacía del ser sobre el tener y en desarrollar la autonomía y la creatividad.
Permítanme terminar con dos citas muy conocidas: "No hagas a los demás, lo que no quieras que te hagan a ti" y "Gozamos poco por lo mucho que tenemos y sufrimos mucho por lo poco que nos falta".
viernes, 24 de junio de 2011
Hacerse Cargo
He estado en actitud más bien reflexiva últimamente y por eso no he logrado ponerme a escribir, por cuya razón les pido disculpas a mis queridos seguidores y amigos.
El domingo 12 de junio del corriente año 2011, leí con interés un artículo en la Revista de La Nación (LNR)con el título "Límites, ¿qué es eso?" escrito por Tesy de Biase, refiriéndose obviamente a la actitud del los argentinos ante las normas en general. Pero al leerlo encontré referencias al rol de la escuela que apuntan directamente al interés de este blog. Sí, tiene razón, no pude evitar el impulso de sentarme ante la computadora una vez más para decargar algo de preocupacíon al leer el artículo en cuestión. Así que, querido docente, aférrese a su silla!
La autora escribe que la "tendencia a confundir el ejercicio legítimo y normativo de la autoridad con la práctica sin fundamento ni consenso del autoritarismo es uno de los resortes que explica la resistencia a cumplir y hacer cumplir las reglas, y a rechazar el rol que éstas ejercen para evitar los excesos individuales en la convivencia social". Luego cita al doctor Orlando Calo, decano de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP): "En el ámbito docente escuchamos a una cantidad de educadores declararse impotentes frente a ciertas conductas de los alumnos y reclamar a los equipos técnicos de las escuelas que resuelvan las dificultades que en realidad les competen". ¿Le suena familiar?
En este blog venimos abogando en favor de la necesidad de tener reglas claras con sus correspondientes consecuencias lógicas (en lo posible) acordadas y escritas en cada clase al principio de cada año escolar,(ver post del 11/05/10). Constantemente escucho comentarios acerca de como muchos docentes siguen enviando sus alumnos a la dirección ante un problema de comportamiento en la clase. Esto es inevitable cuando no existen reglas claras en el aula que permiten al docente actuar inmediatamente y adecuadamente dentro de su esfera de responsabilidad. El docente debería saber como actuar en la gran mayoría de estos casos y solamente como excepción enviar al alumno a la dirección para una sanción correctiva.
El artículo citado comenta en este sentido que los profesionales de la Facultad de Psicología de la UNMdP "proponen que padres y maestros asuman su lugar de autoridad-sostén y su rol privilegiado en la transmisión de lo normativo. Desde este lugar, la propuesta es que generen sanciones transformadoras y no solamente punitivas frente al incumplimiento. Además apelan a que cada uno se haga cargo de su lugar y se responsabilice por sus acciones, es decir que se adueñe de sus actos y decisiones".
Talvez esto va a significar un cambio de proceder en muchas escuelas, pero es absolutamente imperitivo que el docente trabaje junto con sus alumnos sobre este tema y así preparar el camino para un efectivo "hacerse cargo", evitando todo similitud con la impunidad y a lo largo, ir transformando nuestra sociedad donde el demasiado común sentimiento "Yo no me hago responsable" vaya desapareciendo de nuestra forma de "ser nacional".
El domingo 12 de junio del corriente año 2011, leí con interés un artículo en la Revista de La Nación (LNR)con el título "Límites, ¿qué es eso?" escrito por Tesy de Biase, refiriéndose obviamente a la actitud del los argentinos ante las normas en general. Pero al leerlo encontré referencias al rol de la escuela que apuntan directamente al interés de este blog. Sí, tiene razón, no pude evitar el impulso de sentarme ante la computadora una vez más para decargar algo de preocupacíon al leer el artículo en cuestión. Así que, querido docente, aférrese a su silla!
La autora escribe que la "tendencia a confundir el ejercicio legítimo y normativo de la autoridad con la práctica sin fundamento ni consenso del autoritarismo es uno de los resortes que explica la resistencia a cumplir y hacer cumplir las reglas, y a rechazar el rol que éstas ejercen para evitar los excesos individuales en la convivencia social". Luego cita al doctor Orlando Calo, decano de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP): "En el ámbito docente escuchamos a una cantidad de educadores declararse impotentes frente a ciertas conductas de los alumnos y reclamar a los equipos técnicos de las escuelas que resuelvan las dificultades que en realidad les competen". ¿Le suena familiar?
En este blog venimos abogando en favor de la necesidad de tener reglas claras con sus correspondientes consecuencias lógicas (en lo posible) acordadas y escritas en cada clase al principio de cada año escolar,(ver post del 11/05/10). Constantemente escucho comentarios acerca de como muchos docentes siguen enviando sus alumnos a la dirección ante un problema de comportamiento en la clase. Esto es inevitable cuando no existen reglas claras en el aula que permiten al docente actuar inmediatamente y adecuadamente dentro de su esfera de responsabilidad. El docente debería saber como actuar en la gran mayoría de estos casos y solamente como excepción enviar al alumno a la dirección para una sanción correctiva.
El artículo citado comenta en este sentido que los profesionales de la Facultad de Psicología de la UNMdP "proponen que padres y maestros asuman su lugar de autoridad-sostén y su rol privilegiado en la transmisión de lo normativo. Desde este lugar, la propuesta es que generen sanciones transformadoras y no solamente punitivas frente al incumplimiento. Además apelan a que cada uno se haga cargo de su lugar y se responsabilice por sus acciones, es decir que se adueñe de sus actos y decisiones".
Talvez esto va a significar un cambio de proceder en muchas escuelas, pero es absolutamente imperitivo que el docente trabaje junto con sus alumnos sobre este tema y así preparar el camino para un efectivo "hacerse cargo", evitando todo similitud con la impunidad y a lo largo, ir transformando nuestra sociedad donde el demasiado común sentimiento "Yo no me hago responsable" vaya desapareciendo de nuestra forma de "ser nacional".
martes, 17 de mayo de 2011
EL ACOSO ESCOLAR ("bullying")
Hablé de este tema en un post anterior en noviembre del 2010 y quisiera agregar algo más sobre el mismo. He visto que se está dando mayor importancia al tema en las escuelas acá en la Argentina ante los posibles efectos que esto puede tener en el rendimiento académico del alumno victima de maltrato y acoso, sobre todo en el contexto escolar. Existe en la actualidad mucho material sobre como manejar el tema en la escuela. Cabe mencionar, por ejemplo, el método propuesto por el psicólogo sueco Anatol Pikas en el año 1989 y el método conocido como "sin acusaciones", "The No Blame Approach" desarrollado por los británicos Maines y Robinson in 1992 y su versión adaptada en castellano por Glyn Stork en 2001. A modo de introducción y para tenerlo muy en cuenta, cito a Isabel Fernandez ("Prevención de la violencia y resolución de conflictos" Edit. Narcea, Madrid) "El comportamiento llamado 'bullying' en el mundo anglosajón y 'mobbing' en el mundo escandinavo, son de difícil traducción ya que son términos coloquiales que se refieren a una amplia gama de conductas. Las consecuencias de éste tipo de situaciones son complejas y multifacéticas. Están involucrados no ya sólo aquellos que desarrollan el proceso de intimidación, humillaciones, agresiones, sino todos los demás agentes que al no participar, o bien consienten el acto (compañeros) o bien desconocen (padres, profesiones) y en ambos casos refuerzan la acción intimidatoria no participando o consintiendo ...".
A continuación quisiera mencionar algunas medidas introductorias que se pueden tomar al respecto:
- En primer lugar informarse bien acerca del tema, sobretodo de su incidencia en el contexto escolar.
- Luego implementar alguna estrategia para descubrir en qué medida están occurriendo hechos de intimidación y agresiones verbales o físicas en la escuela. Establecer el perfil de este comportamiento en su escuela es esencial como primer paso de intervención.
- Finalmente será necesario establecer una política expresa contra todo tipo de intimidación y agresión para toda la escuela. Esta política será el marco dentro del cual se implementará todas las intervenciones ante tales comportamientos dentro de o alrededor de la escuela. La misma exigirá responsabilidad colectiva a través del plan de estudios, mejorando el ambiente más allá del aula y respondiendo rápida y efectivamente ante situaciónes de intimidación y agresión, apoyando y no simplemente castigando a los alumnos directamente involucrados.
Más allá de los métodos conocidos y probados mencionados anteriormente y de una política a nivel escolar que será necesaria para implementarlos quisiera, por ahora, sugirir algunos pasos iniciales y simples para aproximarnos al tema.
- Es fundamental asegurar a la persona siendo acosada (la víctima) que va estar acompañada por un adulto de su elección (docente u otro) en la escuela, para que se sienta más segura y apoyada, una vez que ya ha hablado del tema con alguien de la escuela o del colegio o através de los padres.
- Hacer que los alumnos completen un cuestionario sobre el tema, sobre todo en la clase en la cual ocurren casos de intimidación o agresión.
- Implementar reuniones de clase semanales, invitando, por ejemplo, a los alumnos a comentar algo bueno y luego algo malo que les ha pasado durante la semana. Inevitablemente surgirán casos de bullying y eventualmente él o los que causan el malestar sabrá/n que el tema se conoce. Para este ejercicio es importante que los alumnos estén sentados en rueda evitando, por medio de alguna dinámica, que los alumnos se agrupen siempre al lado de los mismos (amigos). Si el "bully" insiste en su actitud a pesar de todo, entonces se hablará con él/ellos para aclarar que hay límites que no se tolerarán en el colegio y que los adultos (docentes, etc) estarán muy atentos a lo que está pasando al respecto. También será conveniente que se involucren a los padres del/los chico/s involucrado/s.
- Otra posibilidad es que los alumnos contesten ciertas preguntas por escrito, que podrían ser anónimas, acerca de, por ejemplo, con quien les gustaría trabajar en equipo, ir de camping, etc. y con quien no lo harían. El docente debería estar muy atento a todos los comentarios dichos y escritos acerca de los demás y también debería avisar a los alumnos que todo lo escrito quedará entre ellos y el docente.
- Una de las finalidades de estos ejercicios es descubrir quienes son los líderes negativos para avanzar luego en ayudarles a convertirse en líderes positivos para el grupo.
Un Pequeño Gesto
Whereever we walk we leave our footprints whether they be small or large. Ojalá que mi huella, sea en la soledad de una playa o en los pequeños gestos de cada día, deje algo positivo y mejor todavía, alegrar el día de quien pasa por allí.
Amigos: Muchas veces con la excusa que, ah pero son Japoneses, Alemanes, o lo que sea, negamos aceptar que muchos de nuestros comportamientos diarios respecto al trato, el manejo en la ruta, el orden y la limpieza, etc. son inaceptables para cualquiera, y al reflexionar un poco nos damos cuenta que el problema muchas veces somos nosotros mismos, no los otros. Un plan de comportamiento expresamente elaborado en la escuela y en el aula, conocido y aceptado por docentes y alumnos por igual no debe considerarse excepcional o propiedad de alguno que otro colegio. Todos nuestros docentes y educadores merecen tener las herramientas adecuadas para ejercer un estilo de autoridad que fuera auténticamente democrático, establecer un vinculo de respeto y promover en el aula un clima constructivo de trabajo para poder llevar a cabo su labor de enseñanza y aprendizaje. En el contexto de este blog me parecía útil reflexionar sobre este hecho reciente, ya leído por muchos de ustedes me imagino, porque muestra lo que es posible lograr en una comunidad y por qué no, empezando por nuestras escuelas.
UN PEQUEÑO GESTO, UN GRAN EJEMPLO
NOTA DEL EDITOR:
Esta carta, escrita por el inmigrante vietnamita Thanh Minh que trabajó en Fukushima como policía, a un amigo en Vietnam, fue publicado en New America Media, el 19 de marzo. Es un testimonio de la fuerza del espíritu japonés, y un corte interesante de la vida cerca del epicentro de la crisis en la central nuclear de Fukushima en Japón. Fue traducido por el MNOAL editor Andrew Lam, autor de "Come Oriente Occidente: Escribiendo en dos hemisferios" condensado en Shanghai Daily.
Hermano,
¿Cómo estás tu y tu familia? Estos últimos días, todo era un caos. Cuando cierro mis ojos, veo los cadáveres. Cuando abro los ojos, también veo los cadáveres. Cada uno de nosotros debe trabajar 20 horas al día, sin embargo, me gustaría que hubiera días de 48 horas, para que podamos seguir ayudando y rescatar gente.
Estamos sin agua y electricidad, las raciones de alimentos se encuentran cerca de cero. Apenas se consigue trasladar a los refugiados antes de que haya nuevas órdenes para trasladarles a otro lugar.
Actualmente estoy en Fukushima, a unos 25 kilómetros de la planta de energía nuclear. Tengo tanto para decirte que si pudiera escribirlo todo, seguramente se convertiría en una novela acerca de las relaciones y comportamientos humanos en tiempos de crisis.
Aquí la gente mantiene la calma - su sentido de la dignidad y el comportamiento adecuado son muy buenas - así que las cosas no son tan malas como podrían serlo. Pero dado una semana más, no puedo garantizar que las cosas lleguen a un punto en que ya no se pueda proporcionar la debida protección y el orden.
Son seres humanos después de todo, y cuando el hambre y la sed reemplacen la dignidad, van a hacer lo que tienen que hacer. El gobierno está tratando de proveer suministros por vía aérea, con alimentos y medicinas, pero es como dejar caer un poco de sal en el océano.
Hermano, hubo un incidente realmente conmovedor. Se trata de un niño japonés que enseñó a un adulto como yo, una lección sobre cómo comportarse como un ser humano.
Ayer por la noche, me enviaron a una escuela de gramática para ayudar a una organización de caridad a distribuir alimentos a los refugiados. Era una larga fila que serpenteaba un lado a otro y vi. a un niño de alrededor de 9 años de edad. Llevaba una camiseta y un par de pantalones cortos. Estaba haciendo mucho frío y el niño estaba en el final de la cola. Me preocupaba que en el momento que le llegue el turno, no habría ningún alimento. Así que hablé con él. Dijo que estaba en la escuela cuando ocurrió el terremoto. Su padre trabajaba cerca y se dirigía a la escuela. El estaba en el balcón del tercer piso cuando vio el coche de su padre barrido por el tsunami.
Le pregunté acerca de su madre. Dijo que su casa está junto a la playa, que su madre y su hermana pequeña, probablemente no se salvaran. Volvió la cabeza, se secó las lágrimas cuando le pregunté acerca de sus familiares. Estaba temblando por lo que me quité la chaqueta de policía y se la puse a él. Ahí fue cuando mi bolsa de ración de alimentos se cayó. La recogí y se la di a él. "Cuando llegue tu turno, podrías quedarte sin alimentos. Así que aquí está mi parte. Yo ya comí. ¿Por qué no te lo comes?"
El muchacho tomó mi comida, se inclinó. Pensé que se lo comería de inmediato, pero no lo hizo. Tomó la bolsa, se acercó al principio de la cola y la puso con toda la comida que estaba esperando para ser distribuida.
Me sorprendió. Le pregunté por qué no se lo comía, en vez de añadirla a la pila de los alimentos. Él respondió: "Porque veo a gente con mucho más hambre que yo, si lo pongo allí, se van a distribuir los alimentos por igual.."
Cuando escuché eso me di vuelta para que la gente no me vea llorar.
Una sociedad que puede educar a un niño de 9 años de edad, que entiende el concepto de sacrificio por el bien común es una gran sociedad, un gran pueblo.
Bueno, en estas pocas líneas envío a tí y a familia mis mejores deseos.
La hora de mi turno ha llegado nuevamente.
Ha Thanh Minh
10 COSAS QUE DEBEMOS APRENDER DE JAPÓN
1. LA CALMA
Ni una sola imagen de golpearse el pecho o de dolor. La muestra de dolor en sí ha sido dignamente llevada.
2. LA DIGNIDAD
La disciplina en las colas para el agua y los alimentos. Ni una palabra áspera o un gesto de crudo.
3. LA CAPACIDAD
De los arquitectos, increíble, los edificios se balanceaban, pero no caían.
4. LA GRACIA
La gente compraba sólo lo que necesitaba para el momento, por lo que todo el mundo podía conseguir algo.
5. EL ORDEN
No hay saqueos en las tiendas. No tocan la bocina y no adelantan en las carreteras. Sólo comprensión.
6. EL SACRIFICIO
Cincuenta trabajadores quedaron atrás para bombear agua de mar en los N-reactores, sin pensar en cómo es que alguna vez los recompensarán.
7. LA TERNURA
Los restaurantes redujeron los precios. El fuerte cuida a los débiles.
8. LA FORMACIÓN
La gente de edad y los niños, todo el mundo sabía exactamente qué hacer. E hicieron precisamente eso.
9. LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
Ellos mostraron moderación magnífica en los boletines. Ningún periodista publicó tonterías. Sólo reportajes para difundir la calma.
10. LA CONCIENCIA
¡Cuando se cortó la luz en una tienda, la gente volvió a poner las cosas en los estantes y se marchó en silencio!
Amigos: Muchas veces con la excusa que, ah pero son Japoneses, Alemanes, o lo que sea, negamos aceptar que muchos de nuestros comportamientos diarios respecto al trato, el manejo en la ruta, el orden y la limpieza, etc. son inaceptables para cualquiera, y al reflexionar un poco nos damos cuenta que el problema muchas veces somos nosotros mismos, no los otros. Un plan de comportamiento expresamente elaborado en la escuela y en el aula, conocido y aceptado por docentes y alumnos por igual no debe considerarse excepcional o propiedad de alguno que otro colegio. Todos nuestros docentes y educadores merecen tener las herramientas adecuadas para ejercer un estilo de autoridad que fuera auténticamente democrático, establecer un vinculo de respeto y promover en el aula un clima constructivo de trabajo para poder llevar a cabo su labor de enseñanza y aprendizaje. En el contexto de este blog me parecía útil reflexionar sobre este hecho reciente, ya leído por muchos de ustedes me imagino, porque muestra lo que es posible lograr en una comunidad y por qué no, empezando por nuestras escuelas.
UN PEQUEÑO GESTO, UN GRAN EJEMPLO
NOTA DEL EDITOR:
Esta carta, escrita por el inmigrante vietnamita Thanh Minh que trabajó en Fukushima como policía, a un amigo en Vietnam, fue publicado en New America Media, el 19 de marzo. Es un testimonio de la fuerza del espíritu japonés, y un corte interesante de la vida cerca del epicentro de la crisis en la central nuclear de Fukushima en Japón. Fue traducido por el MNOAL editor Andrew Lam, autor de "Come Oriente Occidente: Escribiendo en dos hemisferios" condensado en Shanghai Daily.
Hermano,
¿Cómo estás tu y tu familia? Estos últimos días, todo era un caos. Cuando cierro mis ojos, veo los cadáveres. Cuando abro los ojos, también veo los cadáveres. Cada uno de nosotros debe trabajar 20 horas al día, sin embargo, me gustaría que hubiera días de 48 horas, para que podamos seguir ayudando y rescatar gente.
Estamos sin agua y electricidad, las raciones de alimentos se encuentran cerca de cero. Apenas se consigue trasladar a los refugiados antes de que haya nuevas órdenes para trasladarles a otro lugar.
Actualmente estoy en Fukushima, a unos 25 kilómetros de la planta de energía nuclear. Tengo tanto para decirte que si pudiera escribirlo todo, seguramente se convertiría en una novela acerca de las relaciones y comportamientos humanos en tiempos de crisis.
Aquí la gente mantiene la calma - su sentido de la dignidad y el comportamiento adecuado son muy buenas - así que las cosas no son tan malas como podrían serlo. Pero dado una semana más, no puedo garantizar que las cosas lleguen a un punto en que ya no se pueda proporcionar la debida protección y el orden.
Son seres humanos después de todo, y cuando el hambre y la sed reemplacen la dignidad, van a hacer lo que tienen que hacer. El gobierno está tratando de proveer suministros por vía aérea, con alimentos y medicinas, pero es como dejar caer un poco de sal en el océano.
Hermano, hubo un incidente realmente conmovedor. Se trata de un niño japonés que enseñó a un adulto como yo, una lección sobre cómo comportarse como un ser humano.
Ayer por la noche, me enviaron a una escuela de gramática para ayudar a una organización de caridad a distribuir alimentos a los refugiados. Era una larga fila que serpenteaba un lado a otro y vi. a un niño de alrededor de 9 años de edad. Llevaba una camiseta y un par de pantalones cortos. Estaba haciendo mucho frío y el niño estaba en el final de la cola. Me preocupaba que en el momento que le llegue el turno, no habría ningún alimento. Así que hablé con él. Dijo que estaba en la escuela cuando ocurrió el terremoto. Su padre trabajaba cerca y se dirigía a la escuela. El estaba en el balcón del tercer piso cuando vio el coche de su padre barrido por el tsunami.
Le pregunté acerca de su madre. Dijo que su casa está junto a la playa, que su madre y su hermana pequeña, probablemente no se salvaran. Volvió la cabeza, se secó las lágrimas cuando le pregunté acerca de sus familiares. Estaba temblando por lo que me quité la chaqueta de policía y se la puse a él. Ahí fue cuando mi bolsa de ración de alimentos se cayó. La recogí y se la di a él. "Cuando llegue tu turno, podrías quedarte sin alimentos. Así que aquí está mi parte. Yo ya comí. ¿Por qué no te lo comes?"
El muchacho tomó mi comida, se inclinó. Pensé que se lo comería de inmediato, pero no lo hizo. Tomó la bolsa, se acercó al principio de la cola y la puso con toda la comida que estaba esperando para ser distribuida.
Me sorprendió. Le pregunté por qué no se lo comía, en vez de añadirla a la pila de los alimentos. Él respondió: "Porque veo a gente con mucho más hambre que yo, si lo pongo allí, se van a distribuir los alimentos por igual.."
Cuando escuché eso me di vuelta para que la gente no me vea llorar.
Una sociedad que puede educar a un niño de 9 años de edad, que entiende el concepto de sacrificio por el bien común es una gran sociedad, un gran pueblo.
Bueno, en estas pocas líneas envío a tí y a familia mis mejores deseos.
La hora de mi turno ha llegado nuevamente.
Ha Thanh Minh
10 COSAS QUE DEBEMOS APRENDER DE JAPÓN
1. LA CALMA
Ni una sola imagen de golpearse el pecho o de dolor. La muestra de dolor en sí ha sido dignamente llevada.
2. LA DIGNIDAD
La disciplina en las colas para el agua y los alimentos. Ni una palabra áspera o un gesto de crudo.
3. LA CAPACIDAD
De los arquitectos, increíble, los edificios se balanceaban, pero no caían.
4. LA GRACIA
La gente compraba sólo lo que necesitaba para el momento, por lo que todo el mundo podía conseguir algo.
5. EL ORDEN
No hay saqueos en las tiendas. No tocan la bocina y no adelantan en las carreteras. Sólo comprensión.
6. EL SACRIFICIO
Cincuenta trabajadores quedaron atrás para bombear agua de mar en los N-reactores, sin pensar en cómo es que alguna vez los recompensarán.
7. LA TERNURA
Los restaurantes redujeron los precios. El fuerte cuida a los débiles.
8. LA FORMACIÓN
La gente de edad y los niños, todo el mundo sabía exactamente qué hacer. E hicieron precisamente eso.
9. LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
Ellos mostraron moderación magnífica en los boletines. Ningún periodista publicó tonterías. Sólo reportajes para difundir la calma.
10. LA CONCIENCIA
¡Cuando se cortó la luz en una tienda, la gente volvió a poner las cosas en los estantes y se marchó en silencio!
martes, 19 de abril de 2011
¿MIS ALUMNOS son Insolentes?
Después de leer este artículo del Dr. Rosen la pregunta me parecía inevitable. Después de todo, docentes y no docentes somos parte de la misma sociedad y compartimos y sufrimos la realidad que nos rodea y muchas veces no es fácil ver la viga en el propio ojo.
El programa de comportamiento integral para la escuela que proponemos acá calza perfectamente, a mí me parece, en el excelente planteo hecho por el autor. No podemos substituir al hogar pero sí podemos ayudar afianzar los valores que el buen hogar desee enseñar y en su ausencia, por lo menos intentar una socialización dentro del ámbito escolar. Se pretende enseñar, principalmente con el ejemplo, la importancia del orden, el sentido correcto de la autoridad, el lugar de las reglas y consecuencias claras, el sentido de responsabilidad individual y colectiva, la justicia en todo nuestro actuar que es esencial para cualquier aprendizaje efectivo. A continuación las palabras sabias del Dr. Rosen, que aunque hable de la Argentina no creo que sus expresiones se limitan únicamente a nuestro país.
En mi casa me enseñaron bien.
Cuando yo era un niño, en mi casa me enseñaron a honrar dos reglas sagradas:
Ésta es la regla que fue demolida en la sociedad en la que vivo.
- Tener razón hasta morir
- No escuchar
- Tú me importas sólo si me sirves.
La insolencia en mi país admite que la gente se muera de hambre y que los niños no tengan salud ni educación.
Porque a la insolencia no le importa, es pequeña, ignorante y arrogante.
Porque hay que aprender a hacerlo todos los días. Ése es el desafío.
En ese caso, disculpe.
Dr. Mario Rosen
El Dr. Mario A. Rosen es médico, educador, escritor. Tiene 63 años. Socio fundador de Escuela de Vida, Columbia Training System, y Dr. Rosen & Asociados. Desde hace 15 años coordina grupos de entrenamiento en Educación Responsable para el Adulto. Ha coordinado estos cursos en Neuquén, Córdoba, Tucumán, Rosario, Santa Fe, Bahía Blanca y en Centro América. Médico residente y Becario en Investigación clínica del Consejo Nacional de Residencias Médicas (UBA). Premio Mezzadra de la Facultad de Ciencias Médicas al mejor trabajo de investigación (UBA). Concurrió a cursos de perfeccionamiento y actualización en conducta humana en EEUU y Europa. Invitado a coordinar cursos de motivación en Amway y Essen Argentina, Dealers de Movicom Bellsouth, EPSA, Alico Seguros, Nature, Laboratorios Parke Davis, Melaleuka Argentina, BASF.
lunes, 28 de marzo de 2011
Aliento para los Educadores
Al margen de toda suspicacia política, las siguientes palabras, viniendo de un presidente latinoamericano, nos llena de esperanza y ánimo para profundizar en nuestra vocación docente. Claro que sabemos que somos sembradores y que la cosecha muchas veces no la vemos, por eso tratamos de elegir bien la semilla y de preparar lo mejor posible el terreno donde sembramos. Creemos en la democracia, por imperfecta que sea, también en el aula, y abogamos desde este blog por un estilo de enseñanza y aprendizaje que involucra plenamente al docente y a los alumnos de modo que pueden escucharse, tomarse en serio y trabajar juntos para resolver los problemas de una manera satisfactoria para todos.
MENSAJE SABIO, SENCILLO , SIN ARTIFICIOS NI AMENAZAS.
Dijo José Mujica (Presidente de Uruguay):
Ustedes saben mejor que nadie que en el conocimiento y la cultura no sólo hay esfuerzo sino también placer.
Dicen que la gente que trota por la rambla, llega un punto en el que entra en una especie de éxtasis donde ya no existe el cansancio y sólo le queda el placer.
Creo que con el conocimiento y la cultura pasa lo mismo. Llega un punto donde estudiar, o investigar, o aprender, ya no es un esfuerzo y es puro disfrute.
¡Qué bueno sería que estos manjares estuvieran a disposición de mucha gente!
Qué bueno sería, si en la canasta de la calidad de la vida que el Uruguay puede ofrecer a su gente, hubiera una buena cantidad de consumos intelectuales.
No porque sea elegante sino porque es placentero.
Porque se disfruta, con la misma intensidad con la que se puede disfrutar un plato de tallarines.
¡No hay una lista obligatoria de las cosas que nos hacen felices!
Algunos pueden pensar que el mundo ideal es un lugar repleto de shopping centers.
En ese mundo la gente es feliz porque todos pueden salir llenos de bolsas de ropa nueva y de cajas de electrodomésticos.
No tengo nada contra esa visión, sólo digo que no es la única posible.
Digo que también podemos pensar en un país donde la gente elige arreglar las cosas en lugar de tirarlas, elige un auto chico en lugar de un auto grande, elige abrigarse en lugar de subir la calefacción.
Despilfarrar no es lo que hacen las sociedades más maduras. Vayan a Holanda y vean las ciudades repletas de bicicletas. Allí se van a dar cuenta de que el consumismo no es la elección de la verdadera aristocracia de la humanidad. Es la elección de los noveleros y los frívolos.
Los holandeses andan en bicicleta, las usan para ir a trabajar pero también para ir a los conciertos o a los parques.
Porque han llegado a un nivel en el que su felicidad cotidiana se alimenta tanto de consumos materiales como intelectuales.
Así que amigos, vayan y contagien el placer por el conocimiento.
En paralelo, mi modesta contribución va a ser tratar de que los uruguayos anden de bicicleteada en bicicleteada.
LA EDUCACIÓN ES EL CAMINO
Y amigos, el puente entre este hoy y ese mañana que queremos tiene un nombre y se llama educación.
Y miren que es un puente largo y difícil de cruzar.
Porque una cosa es la retórica de la educación y otra cosa es que nos decidamos a hacer los sacrificios que implica lanzar un gran esfuerzo educativo y sostenerlo en el tiempo.
Las inversiones en educación son de rendimiento lento, no le lucen a ningún gobierno, movilizan resistencias y obligan a postergar otras demandas.
Pero hay que hacerlo.
Se lo debemos a nuestros hijos y nietos.
Y hay que hacerlo ahora, cuando todavía está fresco el milagro tecnológico de Internet y se abren oportunidades nunca vistas de acceso al conocimiento.
Yo me crié con la radio, vi nacer la televisión, después la televisión en colores, después las transmisiones por satélite.
Después resultó que en mi televisor aparecían cuarenta canales, incluidos los que trasmitían en directo desde Estados Unidos, España e Italia.
Después los celulares y después la computadora, que al principio sólo servía para procesar números.
Cada una de esas veces, me quedé con la boca abierta.
Pero ahora con Internet se me agotó la capacidad de sorpresa.
Me siento como aquellos humanos que vieron una rueda por primera vez.
O como los que vieron el fuego por primera vez.
Uno siente que le tocó en suerte vivir un hito en la historia.
Se están abriendo las puertas de todas las bibliotecas y de todos los museos; van a estar a disposición, todas las revistas científicas y todos los libros del mundo.
Y probablemente todas las películas y todas las músicas del mundo.
Es abrumador.
Por eso necesitamos que todos los uruguayos y sobre todo los uruguayitos sepan nadar en ese torrente.
Hay que subirse a esa corriente y navegar en ella como pez en el agua.
Lo conseguiremos si está sólida esa matriz intelectual de la que hablábamos antes.
Si nuestros chiquilines saben razonar en orden y saben hacerse las preguntas que valen la pena.
Es como una carrera en dos pistas, allá arriba en el mundo el océano de información, acá abajo preparándonos para la navegación trasatlántica.
Escuelas de tiempo completo, facultades en el interior, enseñanza terciaria masificada.
Y probablemente, inglés desde el preescolar en la enseñanza pública.
Porque el inglés no es el idioma que hablan los yanquis, es el idioma con el que los chinos se entienden con el mundo.
No podemos estar afuera. No podemos dejar afuera a nuestros chiquilines.
Esas son las herramientas que nos habilitan a interactuar con la explosión universal del conocimiento.
Este mundo nuevo no nos simplifica la vida, nos la complica..
Nos obliga a ir más lejos y más hondo en la educación. No hay tarea más grande delante de nosotros.
José Mujica (Presidente de Uruguay)
MENSAJE SABIO, SENCILLO , SIN ARTIFICIOS NI AMENAZAS.
Dijo José Mujica (Presidente de Uruguay):
Ustedes saben mejor que nadie que en el conocimiento y la cultura no sólo hay esfuerzo sino también placer.
Dicen que la gente que trota por la rambla, llega un punto en el que entra en una especie de éxtasis donde ya no existe el cansancio y sólo le queda el placer.
Creo que con el conocimiento y la cultura pasa lo mismo. Llega un punto donde estudiar, o investigar, o aprender, ya no es un esfuerzo y es puro disfrute.
¡Qué bueno sería que estos manjares estuvieran a disposición de mucha gente!
Qué bueno sería, si en la canasta de la calidad de la vida que el Uruguay puede ofrecer a su gente, hubiera una buena cantidad de consumos intelectuales.
No porque sea elegante sino porque es placentero.
Porque se disfruta, con la misma intensidad con la que se puede disfrutar un plato de tallarines.
¡No hay una lista obligatoria de las cosas que nos hacen felices!
Algunos pueden pensar que el mundo ideal es un lugar repleto de shopping centers.
En ese mundo la gente es feliz porque todos pueden salir llenos de bolsas de ropa nueva y de cajas de electrodomésticos.
No tengo nada contra esa visión, sólo digo que no es la única posible.
Digo que también podemos pensar en un país donde la gente elige arreglar las cosas en lugar de tirarlas, elige un auto chico en lugar de un auto grande, elige abrigarse en lugar de subir la calefacción.
Despilfarrar no es lo que hacen las sociedades más maduras. Vayan a Holanda y vean las ciudades repletas de bicicletas. Allí se van a dar cuenta de que el consumismo no es la elección de la verdadera aristocracia de la humanidad. Es la elección de los noveleros y los frívolos.
Los holandeses andan en bicicleta, las usan para ir a trabajar pero también para ir a los conciertos o a los parques.
Porque han llegado a un nivel en el que su felicidad cotidiana se alimenta tanto de consumos materiales como intelectuales.
Así que amigos, vayan y contagien el placer por el conocimiento.
En paralelo, mi modesta contribución va a ser tratar de que los uruguayos anden de bicicleteada en bicicleteada.
LA EDUCACIÓN ES EL CAMINO
Y amigos, el puente entre este hoy y ese mañana que queremos tiene un nombre y se llama educación.
Y miren que es un puente largo y difícil de cruzar.
Porque una cosa es la retórica de la educación y otra cosa es que nos decidamos a hacer los sacrificios que implica lanzar un gran esfuerzo educativo y sostenerlo en el tiempo.
Las inversiones en educación son de rendimiento lento, no le lucen a ningún gobierno, movilizan resistencias y obligan a postergar otras demandas.
Pero hay que hacerlo.
Se lo debemos a nuestros hijos y nietos.
Y hay que hacerlo ahora, cuando todavía está fresco el milagro tecnológico de Internet y se abren oportunidades nunca vistas de acceso al conocimiento.
Yo me crié con la radio, vi nacer la televisión, después la televisión en colores, después las transmisiones por satélite.
Después resultó que en mi televisor aparecían cuarenta canales, incluidos los que trasmitían en directo desde Estados Unidos, España e Italia.
Después los celulares y después la computadora, que al principio sólo servía para procesar números.
Cada una de esas veces, me quedé con la boca abierta.
Pero ahora con Internet se me agotó la capacidad de sorpresa.
Me siento como aquellos humanos que vieron una rueda por primera vez.
O como los que vieron el fuego por primera vez.
Uno siente que le tocó en suerte vivir un hito en la historia.
Se están abriendo las puertas de todas las bibliotecas y de todos los museos; van a estar a disposición, todas las revistas científicas y todos los libros del mundo.
Y probablemente todas las películas y todas las músicas del mundo.
Es abrumador.
Por eso necesitamos que todos los uruguayos y sobre todo los uruguayitos sepan nadar en ese torrente.
Hay que subirse a esa corriente y navegar en ella como pez en el agua.
Lo conseguiremos si está sólida esa matriz intelectual de la que hablábamos antes.
Si nuestros chiquilines saben razonar en orden y saben hacerse las preguntas que valen la pena.
Es como una carrera en dos pistas, allá arriba en el mundo el océano de información, acá abajo preparándonos para la navegación trasatlántica.
Escuelas de tiempo completo, facultades en el interior, enseñanza terciaria masificada.
Y probablemente, inglés desde el preescolar en la enseñanza pública.
Porque el inglés no es el idioma que hablan los yanquis, es el idioma con el que los chinos se entienden con el mundo.
No podemos estar afuera. No podemos dejar afuera a nuestros chiquilines.
Esas son las herramientas que nos habilitan a interactuar con la explosión universal del conocimiento.
Este mundo nuevo no nos simplifica la vida, nos la complica..
Nos obliga a ir más lejos y más hondo en la educación. No hay tarea más grande delante de nosotros.
José Mujica (Presidente de Uruguay)
miércoles, 23 de marzo de 2011
Ser Docente no es poca cosa
Que los docentes recibamos quejas de los padres de nuestros alumnos cuando algo va mal en su rendimiento lo podemos considerar algo normal. Por otro lado muchos de los que exigen respuestas satisfactorias de los docentes probablemente nunca han tenido que conducir un grupo de personas, mucho menos 30 niños o jóvenes de distintas capacidades dentro de un ambiente muy limitado, con pocos recursos, durante varias horas, cinco días de la semana. Enseñar no es dar un discurso y la docencia no termina con las cuatro horas dentro de la clase. Por eso nuestra insistencia en la necesidad de proveer cada vez más recursos para la enseñanza misma y el manejo del aula.
La siguiente parábola que me ha llegado y que probablemente muchos ya conocen nos presenta de una manera entretenida las demandas diarias de una clase cualquiera. Que la disfruten.
Para todos aquellos que preguntan sobre el estado de la educación y para los que cavilan sobre el rol docente.
Para los que no son docentes.... dejen de tratar de explicarnos lo que deberíamos hacer y háganse una idea de con lo que tenemos que lidar a diario!!!!!
• PARÁBOLA DEL PEDAGOGO
En aquel tiempo subió Jesús a la montaña seguido por la multitud y, sentándose sobre una gran piedra dejó que sus discípulos y seguidores se le acercaran. Después, tomando la palabra les enseñó diciendo:
En verdad os digo que serán bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos será el Reino de los Cielos. Que serán bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán saciados.
Que serán bienaventurados los misericordiosos porque ellos…
• ¿Dónde está tu planificación?
• Cuál es la nomenclatura de tu proyecto áulico en esta intervención didáctica mediatizada?
• ¿Y tu base diagnóstica?
• ¿Y tu auto evaluación institucional?
• ¿Cuáles son tus expectativas de logros?
• ¿Tiendes al abordaje del área en forma globalizada, que permita el acceso a la significación de los contextos, teniendo en cuenta la bipolaridad de la transmisión?
• ¿Cuáles son tus estrategias conducentes al rescate de los saberes previos?
• ¿Responden éstos a los intereses y necesidades del grupo para asegurar la significatividad del proceso de enseñanza y aprendizaje?
• ¿Has incluido actividades integradoras con fundamento epistemológico productivo?
• ¿Y los espacios alternativos de las problemáticas curriculares generales?
• ¿Has propiciado espacios de encuentro para coordinar acciones transversales y longitudinales que fomenten los vínculos operativos y cooperativos de las áreas concomitantes?
• ¿Cuáles son los contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales que responden a los sustentos lógico, praxeológico y metodológico constituidos por los núcleos generativos disciplinarios, transdisciplinarios, interdisciplinarios y metadisciplinarios?
Caifás, el peor de todos, le dijo a Jesús :
Después de las instancias compensatorias de diciembre, marzo y julio, me reservo el derecho de promover directamente a tus discípulos para que al Rey no le fallen las encuestas de evaluación de calidad ni se le caigan los porcentajes de rendimiento.
Serás notificado oportunamente por la vía que corresponde.
¡Ojo con aplazar a alguno!.
Recuerda que aún eres interino y que no presentaste la declaración jurada de incompatibilidad
…y Jesús pidió la jubilación anticipada
a los treinta y tres años de edad…
La siguiente parábola que me ha llegado y que probablemente muchos ya conocen nos presenta de una manera entretenida las demandas diarias de una clase cualquiera. Que la disfruten.
Para todos aquellos que preguntan sobre el estado de la educación y para los que cavilan sobre el rol docente.
Para los que no son docentes.... dejen de tratar de explicarnos lo que deberíamos hacer y háganse una idea de con lo que tenemos que lidar a diario!!!!!
• PARÁBOLA DEL PEDAGOGO
En aquel tiempo subió Jesús a la montaña seguido por la multitud y, sentándose sobre una gran piedra dejó que sus discípulos y seguidores se le acercaran. Después, tomando la palabra les enseñó diciendo:
En verdad os digo que serán bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos será el Reino de los Cielos. Que serán bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán saciados.
Que serán bienaventurados los misericordiosos porque ellos…
- Pedro interrumpió: ¿Tenemos que aprender eso de memoria?
- Andrés dijo:¿Tenemos que pasarlo a la carpeta?
- Santiago preguntó: ¿Nos va a evaluar con eso?
- Felipe se lamentó: ¡No traje el papiro borrador!
- Bartolomé inquirió: ¿Tenemos que tomar apuntes?
- Juan levantó la mano: ¿Me das permiso para ir al baño?
- Judas exclamó: ¿Para qué sirve todo esto?
- Tomás se inquietó: ¿Hay fórmulas, resolveremos problemas?
- Tadeo clamó: ¡Pero, porqué no nos das la guía y ya está!
- Mateo se quejó: ¡No entendí nada, nadie entendió nada!!
Uno de los fariseos presentes que nunca había estado frente a una multitud, ni enseñado nada, tomó la palabra y se dirigió a Él diciendo:
• ¿Dónde está tu planificación?
• Cuál es la nomenclatura de tu proyecto áulico en esta intervención didáctica mediatizada?
• ¿Y tu base diagnóstica?
• ¿Y tu auto evaluación institucional?
• ¿Cuáles son tus expectativas de logros?
• ¿Tiendes al abordaje del área en forma globalizada, que permita el acceso a la significación de los contextos, teniendo en cuenta la bipolaridad de la transmisión?
• ¿Cuáles son tus estrategias conducentes al rescate de los saberes previos?
• ¿Responden éstos a los intereses y necesidades del grupo para asegurar la significatividad del proceso de enseñanza y aprendizaje?
• ¿Has incluido actividades integradoras con fundamento epistemológico productivo?
• ¿Y los espacios alternativos de las problemáticas curriculares generales?
• ¿Has propiciado espacios de encuentro para coordinar acciones transversales y longitudinales que fomenten los vínculos operativos y cooperativos de las áreas concomitantes?
• ¿Cuáles son los contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales que responden a los sustentos lógico, praxeológico y metodológico constituidos por los núcleos generativos disciplinarios, transdisciplinarios, interdisciplinarios y metadisciplinarios?
Caifás, el peor de todos, le dijo a Jesús :
Después de las instancias compensatorias de diciembre, marzo y julio, me reservo el derecho de promover directamente a tus discípulos para que al Rey no le fallen las encuestas de evaluación de calidad ni se le caigan los porcentajes de rendimiento.
Serás notificado oportunamente por la vía que corresponde.
¡Ojo con aplazar a alguno!.
Recuerda que aún eres interino y que no presentaste la declaración jurada de incompatibilidad
…y Jesús pidió la jubilación anticipada
a los treinta y tres años de edad…
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